Más a menudo de lo que quisiéramos nos encontramos con noticias de acoso escolar ... y desgraciadamente, no serán las últimas.
Debemos hacer todo lo que esté en nuestra mano para intentar que no sean más ... empezando por una buena información.
Todos debemos estar convencidos de que, el maltrato, sea en la forma en que sea, es intolerable y debe terminar. El maltrato es inadmisible como estilo de comunicación y relación.
Los adultos debemos usar todas las estrategias para hablar con los menores si tenemos sospechas de acoso escolar, porque no siempre es fácil hablar con ellos.
El acoso escolar o como también se le denomina “bullying”, se trata de un tipo específico de violencia que es ejercido o sufrido por un alumno. Viene de la palabra BULLY - MATÒN.
Se diferencia de otras conductas violentas por formar parte de un proceso con características específicas que aumentan su gravedad:
1. No se limita a un suceso aislado, sino que se repite y se prolonga en el tiempo, aumentando su intensidad.
2. Se da una situación de desigualdad entre acosador y víctima, pues generalmente el acosador suele contar con el apoyo de un grupo que anima su conducta violenta, mientras que la víctima suele presentarse indefensa y aislada.
3. Se perpetúa en el tiempo, a causa de la ignorancia o pasividad de las personas que rodean a agresor y víctima.
4. Suele implicar más de un tipo de conducta violenta, iniciándose por lo general con agresiones sociales y verbales, e incluyendo después coacciones y agresiones de carácter físico.